¿Quiénes somos?

Podríamos definirnos como un grupo de jóvenes que, a día de hoy, estudiamos 2º curso de Enfermería y que utilizaremos este blog a modo de herramienta complementaria de la asignatura de Enfermería Médico-Quirúrgica.

martes, 8 de noviembre de 2011

Bibliografía 7

Quemaduras

Bibliografía: Elena lucas MP. Cura de quemaduras. En: González Gómez I, Herrero Alarcón A. Técnicas y procedimientos de enfermería. Madrid: DAE; 2009. P. 157-163.
He elegido esta bibiliografía porque complementa lo visto en clase, a parte de que habla de la cura de las zonas especiales como la cara y la palma de la mano, lo que me parece muy interesante.
Las quemaduras son lesiones producidas en la piel por el calor, frío, la electricidad, productos químicos corrosivos, sol o radiaciones ionizantes. Para realizar la cura de una quemadura primero debemos hacer la valoración de la importancia de ésta. Obsevaremos principalmente dos características:
- Extensión: Para cuantificar el porcentaje de superficie corporal afectada podemos utilizar la escala de Wallace, o del nueve, que consiste en dividir el cuerpo en regiones que representan múltiplos de nueve del total. Esta valoración no sirve para los niños, en los que utilizaremos la clasificación de Lund y Browder.

 






- Profundidad: Según la profundidad podemos distinguir varios grados:
            · Grado 1: epidermis afectada. Piel eritematosa y edematosa. Lesión muy dolora. La curación es espontánea sin cicatriz.
            · Grado 2:
a)    Superficial: Afectación de la epidermis más 1/3 superficial de dermis. Piel rosada y con ampollas. Lesión muy dolorosa. Curación espontánea con cicatriz.
b)    Profunda: total de la epidermis y de la dermis afectadas. Lesión con escara, no dolorosa. Curación muy lenta con cicatriz y pérdida de vello.
· Grado 3: piel y anejos afectados. Lesión con escara no dolorosa. Curación muy lenta con cicatriz. Puede haber (más o menos) retracción y puede ser necesario un injerto.
· Grado 4: afectación de tendones, huesos y articulaciones.
Otro apartado que me ha parecido muy interesante en mi libro elegido es las quemaduras en partes especiales.
Manos
Se debe realizar una limpieza cuidadosa con solución jabonosa de clorhexidina o povidona yodada, tenido que aclarar después con suero fisiológico o agua estéril.
Después se retiran con pinzas y tijeras estériles los restos de piel dañada y los cuerpos extraños, pudiendo ser necesaria la aplicación de un antimicrobiano local para prevenir la infección.
Se cubrirán las lesiones con gasa y se realizará el vendaje de cada dedo de forma individual(nunca comprimiendo), manteniendo la posición de seguridad: muñeca en extensión 20-30º, articulaciones metacarpianas y falángicas flexionadas 80-90º, articulaciones interfalángicas en extensión pulgar en abducción. Esto se consigue poniendo una férula.
Deberán empezar pronto las movilizaciones activas y pasivas, considerando que si el paciente puede mover la mano, la férula se colocará por la noche. El paciente puede necesitar la ayuda de un fisioterapeuta de área.
Cara

Corresponde al 3% de la superficie corporal en adultos. Para curar esta zona debemos:
Se realizará una limpieza cuidadosa con suero salino, seguida de la aplicación de pomadas antimicrobianas. Cuando se consiga la reepitelización, se aplicará crema hidratante y de alta protección solar. Este procedimiento debemos realizarlo cada 24 horas.
Con este tipo de cura tenemos que tener en cuenta que la cara es una parte con una gran importancia para la relación social y que tiene peores resultados estéticos que otras partes, provocando las secuelas en el paciente graves repercusiones funcionales y psicológicas. Además las quemaduras de la cara, sólo se podrán tratar ambulatoriamente las de primer y segundo grado superficiales.

Bibliografía realizada por Juan Diego Egido Riscos el día 8 de Noviembre de 2011.



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